Obsesión, de Luchino Visconti (1943)

Ayer leía que Visconti en los años 30 estuvo trabajando en películas de Jean Renoir. Nunca había pensado en esa relación. El cine de Renoir es un cine como buena parte del cine francés de esa década que indaga en el lado oscuro del ser humano: en la violencia que rodea la cotidianiedad. Es algo que está en Zola, y que probablemente impregna el aroma de películas cercanas a lo que luego fue el cine negro. Visconti regresa a Italia, todavía en plena época de Mussolini, y realiza esta película. Una indagación sobre las pasiones oscuras y negras de la condición humana con una adaptación de "El cartero siempre llama dos veces". Es sorprendente pensar que la pudo realizar en esos años evitando la censura, y nos remite a grandes películas como "La Caza" de Carlos Saura (1965) o "Furtivos" de José Luís Borau (1975), en la España de época franquista.No es cine político, pero refleja la época con un aroma a opresión y a represión. Italia sale bella pero con una pesada carga en la atmósfera. . Cuando la guerra termina, el neorrealismo estalla (con Visconti entre sus principales figuras), y creo que ese aroma de opresión va a impregnar a todo el cine neorrealista con una carga más social y política. El propio Visconti lo hace en el cine más interesante por su parte como "La tierra tiembla" (1948) o la más tardía "Rocco y sus hermanos" (1960), en una época de cierre del neorrealismo. Sin embargo el cine negro en Italia no tendrá tanta continuidad.El neorrealismo es una forma de expresión única con auténticas cumbres del arte del cine. A mi me cambió la vida y la mirada. No debería dejarse de disfrutarse como se merece.